Y es que aborrezco el consumismo.
Esta historia la conocemos todos y suele empezar
con la inocente frase "Me hacen falta (y pondremos por ejemplo) unos
pantalones", aunque se dan casos peores en que la frase es aún más
inocente: "Voy a dar una vuelta a ver si veo algo".
En ese momento empieza el juego. El juego
consiste en entrar de tienda en tienda intentando esquivar dependientes/as que
te asaltan.
Hago aquí un paréntesis y explicación sobre casos
de tiendas donde preparan emboscadas dignas del mejor estratega. Entras
confiado, la persona de la caja te saluda y no ves a nadie más, te relajas
¡ERROR! (En una tienda nunca hay que relajarse) Cuando ya te has adentrado
demasiado aparece el primer ataque, de frente pero inesperado. ¿Te puedo
ayudar? quizá pienses que lo has esquivado con un "No, gracias, solo estoy
mirando" pero sin darte cuenta ya te han cortado la huida con ofertas,
descuentos y solo Dios sabe con qué más artes oscuras.
Volviendo al tema, buscar de tienda en tienda
aquello que necesitas es complicado. Lo que te gusta, no tienen tu talla. De lo
que tienen tu talla, no tienen el color que te gusta. La prenda del color que
te gusta, no te sienta bien. La que te sienta bien no se acopla a tu
presupuesto. La que se acopla a tu presupuesto, no te gusta y vueeeeelta a
empezar.
Y claro, este círculo vicioso que se repite en
cada tienda mientras intentas despistar
dependientes sedientos de comisiones crea más tensión que una partida de
Monopoly, Jungle Speed o el UNO combinados en un único juego.
Para terminar comentar que dejaremos el "ir
de compras en rebajas" para otro momento, porque este tema se merece una
guía de supervivencia.
Sr. Odio :^P
Cuanta razón tienes!!! Ir de compras es un absoluto infierno! A mi, personalmente, no me gusta, pero, a veces, es eso que tienes el día y vas a las tiendas y no hay nada que puedas comprar y te vas cabreado con el mundo y Agatha Ruiz de la Prada. Muy frustrante.
ResponderEliminarMenos mal que está internet... aunque con la ropa y calzado es complicado.
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